jueves, 23 de mayo de 2013

LA PERSONALIDAD HIPOCONDRÍACA




Cuando hablamos de personalidad hipocondríaca, nos estamos refiriendo a aquellas personas que se caracterizan por una serie de rasgos de personalidad tendentes a la autoobservación y vigilancia de cualquier cambio corporal, ya que existe en ellos un temor persistente, injustificado y excesivo a sufrir alguna enfermedad y en última instancia a morir.


Un hipocondríaco suele estar excesivamente pendiente de sí mismo y es muy desconfiado de sus propias sensaciones físicas -realizando una interpretación errónea y catastrofista de cualquier molestia o síntoma físico que pueda observarse. Esta circunstancia le hace muy sugestionable y, en muchas ocasiones, les impide estar pendientes de los demás y de sus necesidades. Este hecho genera una percepción subjetiva de los demás sobre ellos, viéndoles como unas personas muy egoístas.
En muchas ocasiones aparecen pensamientos obsesivos y comportamientos compulsivos en relación con enfermedades o su posible contagio.
Además, el hipocondríoaco suele tener actitudes narcisistas y egocéntricas y son muy sensibles a las críticas de los demás. En ocasiones, son más materialistas y obstinados en sus planteamientos sobre todo los que hacen alusión a enfermedades, su tratamiento médico, etc.
Puede haber otro tipo de personas con hipocondría que se muestren muy aprensivas en cuanto a la salud de sus hijos y personas del grupo familiar o íntimo (en muchas ocasiones esto lleva a que se aprenda de padres a hijos). El miedo o preocupación exagerados a que el hijo del hipocondríaco pueda caer enfermo, le lleva a recibir cuidados excesivos, a preocuparse por su salud, a aconsejarles en torno a temas de salud y, lentamente, a convertir a sus hijos en hipocondríacos.
En ocasiones, esta personalidad aparece a raíz de alguna experiencia traumática que tenga que ver con una enfermedad o muerte de personas cercanas.
En otras ocasiones es algo más sutil, que da comienzo con síntomas propios de la ansiedad (taquicardia, palpitaciones, opresión precordial, cefaleas, vértigo, etc...) que llevan a una larga exploración médica para realizar un diagnóstico que, a pesar de todo, no logra evidenciar ningún tipo de patología (lo que aumenta la suspicacia y el temor del que sufre esa exploración distorsionando la realidad y evidenciando enfermedades muy peligrosas e hipotéticas que encajan con la sintomatología sentida, aunque es imposible contrastarlo objetivamente a nivel real). La duda sobre la naturaleza de su trastorno cobra cada vez más fuerza hasta llevarle a pensar que es una enfermedad grave o difícil de diagnosticar por su relativa extrañeza o que en realidad le está ocultando los resultados reales de las pruebas.
Cuando el médico asegura que la sintomatología no encierra patología y que probablemente se trate de un trastorno psíquico, la mayoría de hipocondríacos se niegan a admitir esta información como realidad y en lugar de iniciar el correspondiente tratamiento psicológico, se inicia una larga peregrinación a otros espacios médicos y a nuevas exploraciones que descubran la causa de sus molestias. Como no se descubre su hipotética enfermedad, aumenta la desesperación y se agravan los síntomas de ansiedad, incrementándose las molestias sentidas y aumentan los pensamientos sobre el progreso de su enfermedad -que se agrava por momentos ante la incapacidad del cuerpo médico para darles ayuda-.
Cuando existe una preocupación exagerada que surge como consecuencia de la creencia o del temor a estar padeciendo una patología orgánica, sin que exista justificación para ello, ya podemos hablar de hipocondría y no solo de personalidad hipocondríaca.
Con fecuencia la hipocondria se asocia a otro tipo de trastornos como la depresión, esquizofrenia, trastornos por ansiedad y de somatización, fobias... Y fobias que generan cuadros hipocondríacos, como fobia a la muerte, a un infarto, al cáncer o a contraer una enfermedad de transmisión sexual como es el SIDA se retroalimentan creando un círculo vicioso por el temor a esa enfermedad y aumentando la intensidad fóbica.
También se puede producir esa asociación con otras fobias no relacionadas directamente con enfermedad alguna, como la agorafobia o algunos casos "obsesivo-compulsivos" (donde la autoexploración puede suponer un ritual típico de este trastorno por ansiedad).
En algunos casos el hipocondríaco llega a buscar una vivienda cerca de algún hospital o centro sanitario o cuando viaja, se asegura de estar bien informado de la localización de los centros médicos disponibles en las localidades a las que pueda viajar.
Este bucle de preocupaciones que genera el hipocondríaco respecto a su hipotética enfermedad, acaba generándole algún tipo de problema o incapacidad en otras áreas de su vida como son el terreno laboral y social o personal.

Precipitantes de la hipocondría:
- Baja autoestima.
- Personalidad obsesiva.
- Depresión, melancolía.
- Ansiedad.
- Narcisismo.
- Miedo a la muerte como común denominador.

Consecuencias de la hipocondría:
- Preocupación exagerada y continua por padecer diferentes enfermedades (al menos dos graves).
- Autoobservación desmesurada de las funciones del cuerpo.
- Máxima atención a las posibles consecuencias negativas, descuidando actitudes más saludables.
- Ansiedad como resultado de la preocupación constante.
- Cambios bruscos en el estado de ánimo, provocando incluso trastornos depresivos.
- Constantemente estar hablando de dolencias experimentadas y síntomas.
- Búsqueda incansable sobre información, habitualmente sobre los síntomas y las posibles enfermedades.
- Aumenta la frecuencia de visitas al médico.
- Observaciones obsesivas de las partes del cuerpo para comprobar su funcionamiento.
- Descuidar actividades cotidianas referentes a las relaciones sociales, laborales, de pareja,etc.
- Centrar la atención en síntomas leves o imaginarios, interpretando de forma catastrófica cualquier pequeña herida o tos ocasional...
- Aumento de las conductas de comprobación como tomarse el pulso, la temperatura, la tensión arterial... varias veces al día.
- Los pensamientos negativos pueden acarrear síntomas físicos como taquicardias, sudores, temblores que serán interpretados de forma errónea magnificando la percepción de gravedad.


Características más importantes de la personalidad hipocondríaca:
- Autoobservación exagerada de la propia corporalidad.
- Temor persistente e injustificado a la enfermedad o la muerte.
- Interpretación catastrofista de sus síntomas físicos.
- Egocentrismo.
- Narcisismo. Conductas egoístas y materialismo.
- Desinterés de las necesidades de los demás.
- Obstinación.
- Escrupulosidad.
- Pensamientos obsesivos y conductas compulsivas en relación a enfermedades.
- Desconfianza.
- Hipersensibilidad a la crítica de otros.
- Sugestionables.




 "Desconozco para que sirven cada una de las pastillas que tomo, pero ellas sí lo saben" (Andrés Aberasturi, periodista español).

3 comentarios:

  1. Gracias. Me gustaría tener pautas sobre como actuar con un familiar hipocondríaco. En mi caso este familiar ya no es funcional y pasa el 90% del tiempo en cama. Es un círculo de enfermedades continuas y eventualmente pequeños accidentes, principalmente caídas, que convierte en catastrofes y afecta a todo el entorno familiar. Los trabajos no le duran ni una semana porque siempre tiene citas médicas. Esta hipermedicado por el psiquiatra ya que se invento un hecho delictivo del que fue víctima que nunca ocurrió y acude a la unidad de víctimas con estrés postraumático. Adicionalmente toma medicación para el dolor en todas sus versiones. Más la medicación de la dolencia de turno. Periódicamente también se deprime y dice que va a suicidarse con paso por urgencias psiquiátricas y más medicación. Reacciona muy mal cuando apenas intentamos cambiar de tema porque únicamente habla de enfermedades y dolores. Toda la familia vivimos casi con la maleta hecha para salir corriendo al hospital porque esto no cesa desde hace 7 u 8 años. Lo triste es que hay niños que están viviendo esto como si fuera algo cotidiano y que repiten patrones como dolores de cabeza, apología de cualquier pequeña herida, etc. En fin. La 0regunta es como actuar? El cónyuge creemos que es codependent e y que de alguna manera patrocina el comportamiento.

    ResponderEliminar
  2. yo sufro esto... pero a mi me afecta en la respiración y posteriormente a la mente, doliendome la parte izquierda del cerebro y aveces adormeciendose la mitad izquierdade todo mi cuerpo, diganme como o quién estaria tranquilo y sereno cuando se adormece medio cuerpo y encima le llegan pensamientos de morirse o enloquecer literalmente ... hay cura para esto xq creo q a este paso m va a dar algo de las dos o me muero con algun tema mental o cerebral o me vuelvo loco y pierdo mi conciencia y quien sabe a q me llevara eso, si asesino o algun retraso mental, en mi opinion creo q preferiria morir que enloquecer y causar problemas

    ResponderEliminar
  3. Yo también sufro esto desde hace 4 años por más que trato no dejo de pensar que tengo cáncer aunque mis síntomas son mentales, tiempo después mi madre enferma de cáncer y mi ansiedad y psicosis aumenta todos los días revisó mi cuerpo buscando indicios de alguna enfermedad, cada cosa rara que observo es la muerte para mí, los doctores no encuentran nada lógicos mis síntomas de alergias, este mes he ido más que nunca al doctor porque simplemente después de unos meses de estrés por el trabajo en diciembre que termine comencé con una gripe fuerte que hasta hoy no ha cedido tratándome ahora de alergia. En momentos tengo lucidez y me dijo a mi misma que todo está bien pero me empiezan el pavor de visitar al doctor especialista en el cáncer que creo que padezco hasta me fijo fechas para por fin hacerme estudios se llega el día y me invade el terror y no voy, esto no es vida creo que solo existo para preocuparme por lo que no ha pasado, soy soltera no tengo hijos pero me preocupo también por si mi madre recae en la enfermedad o alguien más lo pueda oadecer, no se simplemente estoy cansada exhausta de ser así

    ResponderEliminar

¿Quieres dejar aquí tu opinión?

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...